Teniendo en cuenta lo que disfruté con el concierto que ofreció hace unos meses Ariel Rot en el Teatro Juan Bernabé de Lebrija (Sevilla) y lo bien que sonó, éste no podía perdérmelo ni por asomo, aún reconociendo que no soy muy seguidor de la música de Pastora. A bote pronto, como mucho, habré escuchado los singles, pero de antemano sabía que sonarían bastante bien. Y así fue, a pesar de no utilizar el sonido propio del Teatro.
Pastora venían a presentar “Circuítos de Lujo“, su último trabajo discográfico frente a un escaso público que apenas rellenaba la mitad del patio de butacas, pero eso sí, de lo más entregado. Un último álbum enfocado al directo, al cara a cara, al contacto con el público y hacerlo bailar, de hecho, en la tercera canción, alguno que otro ya se había salido al pasillo a mover el esqueleto.
La guapísima Dolo (cómo me gustan las chicas con gafas de Cobra!), sabe cómo moverse en el escenario, sabe cómo tratar al público que casi roza sabe, sobre todo, qué canciones lanzar en cada momento. Estamos, no olvidemos, ante un proyecto de actriz que ha elegido ser cantante como medio para expresar sus emociones, miedos y vivencias.
“Cosas Malas” y “Me Tienes Contenta” para ir calentando el ambiente en el Juan Bernabé. No faltaron los grandes hits de la banda catalana; “Mirona“, “Lola“, “Cuánta Vida“…
Para finalizar, un momento de los más kraftwerkiano, con Dolo enfundada en un vestido raro de cojones, con un baile simulando a un robot y con muchísimas ganas de continuar con un show digno de una sala a rebosar.
