La verdad es que ya me cuesta recordar las veces que he visto a Sidonie en directo. Nunca iguales sobre el escenario el grupo catalán siempre consigue sorprenderme. En esta ocasión, como no, el show más colorido fue en torno a los girasoles de su magnífico tema Giraluna, colofón de su último álbum Costa Azul. Pero además Sidonie sorprendió a propios y extraños con un acompañante llamado Carlos Cros que -además de defender únicamente con su guitarra unos temas más que interesantes frente a un público que no iba a verle a él- hizo una presentación final del grupo que en el día de hoy – y han pasado dos días- todavía tarareo. Hoy he descubierto que el tal Carlos Cros no ha salido de la nada, que viene de Los selenitas y, quien sepa quienes son ya entenderán que, al chico, calidad, no le puede faltar, a pesar de que el grupo se disolviera en 2004 por falta de apoyo discográfico. Tomen nota pues: Carlos Cros y los 400 golpes. Tiempo al tiempo.
